Una Universidad Cercana, una gestión cercana, por Francisco Gámiz Pérez

Los que trabajamos en una Institución cinco veces centenaria como la Universidad de Granada, además de una gran suerte, tenemos una gran responsabilidad, que es todavía mayor si cabe en las personas que la dirigen. Hacen falta muchos años para hacer un Institución Grande, y muy pocos para echarlo todo por la borda. Durante estos últimos cuatro años, la labor de Pilar Aranda al frente de la Universidad de Granada, ha hecho que Ésta sea hoy, más Grande aún que cuando tomó sus riendas, y nos posiciona como Universidad de referencia (así lo certifican todos los rankings), no ya del Sur de España, sino del Sur de Europa. Por lo tanto, objetivo cumplido.

Desde mi punto vista, aunque como en toda actividad humana pudiera haber luces y sombras en su gestión (más luces que sombras seguro), el gran acierto de Pilar ha sido hacer una Universidad cercana, una gestión cercana. Una gestión que ha apoyado hasta donde ha podido, la labor diaria universitaria y a veces, cuando no se ha podido, al menos es mi experiencia, ha sabido explicar por qué ahora no se apoya esta o aquella otra solicitud, propuesta o línea de trabajo. Porque no sólo es importante saber hacer las cosas, es casi tan importante, saber explicarlo.

La Universidad de Granada, además de ser un Templo del Saber y realizar una labor social fundamental, (Granada no sería Granada sin su Universidad), es también el resultado del quehacer cotidiano de un conjunto de Personas, que independientemente de quien nos gobierne, seguirán haciendo su función. La misión de la buena “directora de orquesta” es hacer que todos vayamos remando en la misma dirección de forma que todo sume: al que va solo, no estorbarle, al que le cuesta un poco, darle un empujón, y al que va en dirección contraria, convencerle para que se de la vuelta. Esa es la verdadera función del buen gestor, y de su equipo por supuesto. Y esto, Pilar ha sabido hacerlo. Por lo tanto, mi enhorabuena, y mi agradecimiento.

Durante estos cuatros años se ha avanzado mucho en campos estratégicos como Investigación, consolidando algunas de las iniciativas puestas en marcha por anteriores Equipos de Gobierno e iniciando otras con gran acierto. Se han potenciado los Laboratorios Singulares, se han puesto en marcha las Unidades de Excelencia, y se han reforzado los mecanismos de apoyo a la gestión y promoción de proyectos nacionales e internacionales. Los dos pilares que complementan a la Investigación, Transferencia y Posgrado, deberán potenciarse aún más en los próximos años ya que son los elementos diferenciadores que, en el mundo globalizado del Siglo XXI, diferenciarán a unas Universidades de otras. Investigación, Transferencia, Posgrado e Internacionalización, junto a la importante función Social de la Universidad, marcarán la Excelencia en el futuro cercano.

Como decía Feymann, hay espacio al fondo: hay todavía cosas que mejorar, y Pilar lo sabe, y supongo que por eso ha decidido presentarse a un segundo mandato, para el que le deseo la mejor de las suertes, porque el “saber-cómo”, ya lo ha demostrado.

Prof. Francisco Gámiz Pérez

Director del Laboratorio Singular de Nanoelectrónica, Grafeno y Materiales Bidimensionales